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Macarons de frambuesa: Primer intento

Pues sí, hace ya mucho tiempo que tenía ganas de probar a hacer macarons en casa ¡es que aparte de ricos son super bonitos!. Y he leído ya en muchos sitios que son difíciles de hacer, que no desesperes si no te salen a la primera... pero claro, yo esas cosas las tomo como un reto, jajajaja. ^.^

Así que el otro día, que tenía tiempo libre y no sabía muy bien qué hacer, decidí que ya era hora de intentarlo.

Cogí mi libro de macarons de Annie Rigg, decidí de qué sabor iba a rellenarlos (y que, curiosamente, no viene en el libro), reuní todos los ingredientes, repasé bien las instrucciones, y me puse manos a la obra, con esperanza y determinación a partes iguales.

Pero a veces la ilusión no es suficiente, y esta fue una de esas veces... ¡conseguí hacer unos macarons absolutamente dignos de CraftFail!

Macarons de frambuesa

Jajaja, y eso que os estoy poniendo las fotos buenas... los más feos, los que se pegaron o rompieron, me los comí rápidamente para verlos lo menos posible. Orgullosa que es una :-P

Eso sí, de sabor estaban muy muy ricos, así que no fue un fracaso absoluto. Y además tengo muy claro cuál fue mi error, así que espero poder solucionarlo para la próxima ¡y enseñaros entonces unas fotos decentes!!

Por eso me he decidido al final a poneros la receta: Lo primero para desmentir lo de "a ti se te da todo bien" porque ya veis que no, que soy una persona humana, lo que pasa es que siempre os enseño las cosas bonitas, y no los experimentos fallidos, jajajaja. Y lo segundo porque realmente he visto ya en varios sitios diferentes esta misma receta y a la gente le salen bien, así que merece la pena que lo intentéis. Yo ahora os cuento el problemilla que tuve para que no os pase a vosotros lo mismo ¡y listo!

Macarons de frambuesa


Ingredientes:
Para la masa:
  •    120g de clara de huevo a temperatura ambiente (supuestamente equivalente a 3 huevos, ¡aquí es donde está el punto chungo de la receta!)
  •    40g de azúcar blanco
  •    100g de harina de almendra (yo usé almendras molidas de Vahiné)
  •    200g de icing sugar
  •    Colorante en pasta rosa (yo usé Claret de Sugarflair, aunque se me tostaron un poco y no se aprecia bien bien el color)

Para el relleno:
  •    125g de mantequilla
  •    125g de icing sugar
  •    Un buen puñado de frambuesas (yo utilicé las congeladas que venden en el Lidl)


Elaboración:
  • Tamizamos el icing sugar y las almendras (estas últimas me costó bastante trabajo tamizarlas, pero así conseguí eliminar algunos trocitos grandes de almendra que se habían colado entre el resto). Mezclamos muy bien ambos ingredientes en un bol y reservamos.
  • Montamos las claras a punto de nieve.
  • Añadimos el azúcar blanco y seguimos batiendo hasta que la mezcla esté brillante.
  • Añadimos ahora el colorante. Con muy poca cantidad es suficiente, basta con mojar un palillo en el colorante y remover un poquito las claras con él. Luego batís un poco y veréis como coge todo color enseguida.
  • Por último incorporamos la mezcla del azúcar con la almendra, pero esta vez con una espátula, sin batidora, y removiendo con movimientos envolventes para que las claras no se bajen mucho.
  • Cuando la masa esté homogénea cogemos una manga pastelera con una boquilla redonda y la rellenamos con la masa.
  • Forramos la bandeja del horno con papel de horno, y con ayuda de la manga pastelera vamos haciendo pegotes de 3 o 4 centímetros de diámetro.
  • Cuando tengamos la bandeja llena (salen unas 2 o 3 bandejas por receta, pero hay que hacerlas de una en una) le damos unos golpes secos contra la encimera para que suban las burbujas de aire.
  • Y ahora toca esperar... dependiendo de la temperatura y humedad ambiente el tiempo puede variar, pero podéis tomar como referencia unos 20 minutos... hay que esperar hasta que la masa se seque y al tocarlos no se noten pegajosos. Mientras esperamos podemos ir precalentando el horno.
  • Y cuando estén listos los metemos al horno. Unos 10 minutos a 170ºC.

Y ahora es cuando os cuento dónde estuvo mi fallo... fue básicamente la textura de la masa. Y es que cuando ya está todo mezclado la pasta obtenida debería ser bastante espesa y cremosa: lo suficiente como para aplicarla con manga pastelera y que mantenga la forma en la bandeja. Pero la mía quedó más líquida de lo que debía ¡y que conste que fuí consciente de ello! pero claro ¿cómo espesarla a esas alturas? lo suyo supongo que habría sido añadir más cantidad de almendra+azúcar, pero no me quedaba almendra, y espesarla sólo a base de azúcar me parecía una barbaridad porque iba a resultar demasiado empalagoso, así que finalmente decidí intentar apañarme con lo que tenía y rezar...

Llené la manga pastelera pero la masa estaba tan líquida que prácticamente se me "derramaba" por la boquilla sin apenas apretar, y obviamente una vez que estaba sobre la bandeja empezó a expandirse, con lo cual algunos se pegaron con los de al lado (obteniendo unos maravillosos macarons "dobles") y en general todos se fueron volviendo cada vez más grandes y más finitos.

Por culpa de eso algunos se me rompieron al quitarlos de la bandeja, de lo finitos que eran; y a la hora de rellenar tuve que ponerles poco relleno a todos, porque si no me daba la sensación que iba a ser casi como comerse el buttercream a cucharadas.

La única explicación que se me ocurre es que le eché más clara de huevo de la cuenta, o quizá no la monté lo suficiente, y por eso la masa quedó líquida. Para la próxima lo intentaré sólo con 2 huevos, y si veo que se me queda demasiado seco montaré otra clara en un cacharro aparte y la iré añadiendo hasta tenerlo todo a mi gusto.


También tuve algún problemilla, aunque secundario, con el horneado. Y es que en mi horno 170ºC son demasiados para estos macarons ¡a los 5 minutos ya se estaban poniendo marroncitos pero aún estaban crudos por dentro! le bajé la temperatura al horno y conseguí que se hicieran bien sin tostarse mucho más, pero el daño ya estaba hecho y el brillante color rosa de la masa quedó oculto tras la capita superior tostada... de todos modos asumo que esto es normal, porque ya estoy harta de ver que cada horno es un mundo, y la única forma de que las cosas salgan bien suele ser a base de probar, así que para la próxima ya sé que los tengo que poner a 150ºC ¡y problema solucionado!


Macarons de frambuesa

En cuanto al relleno, no tiene misterio, hice un sencillo buttercream con frambuesas:

  • Batimos a velocidad rápida la mantequilla con el azúcar al menos durante 5 minutos, hasta obtener una pasta cremosa y blanquecina, con textura como de helado.
  • Por otro lado batimos las frambuesas, y las colamos para quitar todas las pepitas.
  • Añadimos la pasta de frambuesa al buttercream y batimos bastante rato a velocidad rápida, para que la fruta se integre bien y desaparezca el aspecto de "cortado" que se obtiene al principio. Podéis añadir las frambuesas que queráis hasta que estéis satisfechos con el sabor, pero no os paséis si no queréis que el buttercream resulte demasiado blando.
  • Rellanamos una manga pastelera con el buttercream y vamos rellenando los macarons al gusto. Aunque ojo, que tienen que haberse enfriado antes de rellenarlos.
  • Una vez que estén todos terminados los dejamos reposar una media hora en la nevera... ¡y a comerrrrrrrrrr!!!!!!! os aseguro que están deliciosos, y el buttercream de frambuesa, que era la primera vez que lo hacía, me ha encantado, sin duda lo haré más veces, para otros postres.


¿Qué? ¿Os animáis a intentarlo? ¿Sois de los que aceptan un reto o preferís cocinar sobre seguro? ¡Contadme!

Ana
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Pues sí, hace ya mucho tiempo que tenía ganas de probar a hacer macarons en casa ¡es que aparte de ricos son super bonitos!. Y he leído ya en muchos sitios que son difíciles de hacer, que no desesperes si no te salen a la primera... pero claro, yo esas cosas las tomo como un reto, jajajaja. ^.^

Así que el otro día, que tenía tiempo libre y no sabía muy bien qué hacer, decidí que ya era hora de intentarlo.

Cogí mi libro de macarons de Annie Rigg, decidí de qué sabor iba a rellenarlos (y que, curiosamente, no viene en el libro), reuní todos los ingredientes, repasé bien las instrucciones, y me puse manos a la obra, con esperanza y determinación a partes iguales.

Pero a veces la ilusión no es suficiente, y esta fue una de esas veces... ¡conseguí hacer unos macarons absolutamente dignos de CraftFail!

Macarons de frambuesa

Jajaja, y eso que os estoy poniendo las fotos buenas... los más feos, los que se pegaron o rompieron, me los comí rápidamente para verlos lo menos posible. Orgullosa que es una :-P

Eso sí, de sabor estaban muy muy ricos, así que no fue un fracaso absoluto. Y además tengo muy claro cuál fue mi error, así que espero poder solucionarlo para la próxima ¡y enseñaros entonces unas fotos decentes!!

Por eso me he decidido al final a poneros la receta: Lo primero para desmentir lo de "a ti se te da todo bien" porque ya veis que no, que soy una persona humana, lo que pasa es que siempre os enseño las cosas bonitas, y no los experimentos fallidos, jajajaja. Y lo segundo porque realmente he visto ya en varios sitios diferentes esta misma receta y a la gente le salen bien, así que merece la pena que lo intentéis. Yo ahora os cuento el problemilla que tuve para que no os pase a vosotros lo mismo ¡y listo!

Macarons de frambuesa


Ingredientes:
Para la masa:
  •    120g de clara de huevo a temperatura ambiente (supuestamente equivalente a 3 huevos, ¡aquí es donde está el punto chungo de la receta!)
  •    40g de azúcar blanco
  •    100g de harina de almendra (yo usé almendras molidas de Vahiné)
  •    200g de icing sugar
  •    Colorante en pasta rosa (yo usé Claret de Sugarflair, aunque se me tostaron un poco y no se aprecia bien bien el color)

Para el relleno:
  •    125g de mantequilla
  •    125g de icing sugar
  •    Un buen puñado de frambuesas (yo utilicé las congeladas que venden en el Lidl)


Elaboración:
  • Tamizamos el icing sugar y las almendras (estas últimas me costó bastante trabajo tamizarlas, pero así conseguí eliminar algunos trocitos grandes de almendra que se habían colado entre el resto). Mezclamos muy bien ambos ingredientes en un bol y reservamos.
  • Montamos las claras a punto de nieve.
  • Añadimos el azúcar blanco y seguimos batiendo hasta que la mezcla esté brillante.
  • Añadimos ahora el colorante. Con muy poca cantidad es suficiente, basta con mojar un palillo en el colorante y remover un poquito las claras con él. Luego batís un poco y veréis como coge todo color enseguida.
  • Por último incorporamos la mezcla del azúcar con la almendra, pero esta vez con una espátula, sin batidora, y removiendo con movimientos envolventes para que las claras no se bajen mucho.
  • Cuando la masa esté homogénea cogemos una manga pastelera con una boquilla redonda y la rellenamos con la masa.
  • Forramos la bandeja del horno con papel de horno, y con ayuda de la manga pastelera vamos haciendo pegotes de 3 o 4 centímetros de diámetro.
  • Cuando tengamos la bandeja llena (salen unas 2 o 3 bandejas por receta, pero hay que hacerlas de una en una) le damos unos golpes secos contra la encimera para que suban las burbujas de aire.
  • Y ahora toca esperar... dependiendo de la temperatura y humedad ambiente el tiempo puede variar, pero podéis tomar como referencia unos 20 minutos... hay que esperar hasta que la masa se seque y al tocarlos no se noten pegajosos. Mientras esperamos podemos ir precalentando el horno.
  • Y cuando estén listos los metemos al horno. Unos 10 minutos a 170ºC.

Y ahora es cuando os cuento dónde estuvo mi fallo... fue básicamente la textura de la masa. Y es que cuando ya está todo mezclado la pasta obtenida debería ser bastante espesa y cremosa: lo suficiente como para aplicarla con manga pastelera y que mantenga la forma en la bandeja. Pero la mía quedó más líquida de lo que debía ¡y que conste que fuí consciente de ello! pero claro ¿cómo espesarla a esas alturas? lo suyo supongo que habría sido añadir más cantidad de almendra+azúcar, pero no me quedaba almendra, y espesarla sólo a base de azúcar me parecía una barbaridad porque iba a resultar demasiado empalagoso, así que finalmente decidí intentar apañarme con lo que tenía y rezar...

Llené la manga pastelera pero la masa estaba tan líquida que prácticamente se me "derramaba" por la boquilla sin apenas apretar, y obviamente una vez que estaba sobre la bandeja empezó a expandirse, con lo cual algunos se pegaron con los de al lado (obteniendo unos maravillosos macarons "dobles") y en general todos se fueron volviendo cada vez más grandes y más finitos.

Por culpa de eso algunos se me rompieron al quitarlos de la bandeja, de lo finitos que eran; y a la hora de rellenar tuve que ponerles poco relleno a todos, porque si no me daba la sensación que iba a ser casi como comerse el buttercream a cucharadas.

La única explicación que se me ocurre es que le eché más clara de huevo de la cuenta, o quizá no la monté lo suficiente, y por eso la masa quedó líquida. Para la próxima lo intentaré sólo con 2 huevos, y si veo que se me queda demasiado seco montaré otra clara en un cacharro aparte y la iré añadiendo hasta tenerlo todo a mi gusto.


También tuve algún problemilla, aunque secundario, con el horneado. Y es que en mi horno 170ºC son demasiados para estos macarons ¡a los 5 minutos ya se estaban poniendo marroncitos pero aún estaban crudos por dentro! le bajé la temperatura al horno y conseguí que se hicieran bien sin tostarse mucho más, pero el daño ya estaba hecho y el brillante color rosa de la masa quedó oculto tras la capita superior tostada... de todos modos asumo que esto es normal, porque ya estoy harta de ver que cada horno es un mundo, y la única forma de que las cosas salgan bien suele ser a base de probar, así que para la próxima ya sé que los tengo que poner a 150ºC ¡y problema solucionado!


Macarons de frambuesa

En cuanto al relleno, no tiene misterio, hice un sencillo buttercream con frambuesas:

  • Batimos a velocidad rápida la mantequilla con el azúcar al menos durante 5 minutos, hasta obtener una pasta cremosa y blanquecina, con textura como de helado.
  • Por otro lado batimos las frambuesas, y las colamos para quitar todas las pepitas.
  • Añadimos la pasta de frambuesa al buttercream y batimos bastante rato a velocidad rápida, para que la fruta se integre bien y desaparezca el aspecto de "cortado" que se obtiene al principio. Podéis añadir las frambuesas que queráis hasta que estéis satisfechos con el sabor, pero no os paséis si no queréis que el buttercream resulte demasiado blando.
  • Rellanamos una manga pastelera con el buttercream y vamos rellenando los macarons al gusto. Aunque ojo, que tienen que haberse enfriado antes de rellenarlos.
  • Una vez que estén todos terminados los dejamos reposar una media hora en la nevera... ¡y a comerrrrrrrrrr!!!!!!! os aseguro que están deliciosos, y el buttercream de frambuesa, que era la primera vez que lo hacía, me ha encantado, sin duda lo haré más veces, para otros postres.


¿Qué? ¿Os animáis a intentarlo? ¿Sois de los que aceptan un reto o preferís cocinar sobre seguro? ¡Contadme!

Ana

8 comentarios:

  1. Uoooooh, macarons!! Qué ricos. Yo también me lanzaré algún día, porque el máster ya casi me lo he hecho a base de leer los experimentos de otra cocinilla.
    Seguro que estaban muy buenos. De todas formas, te dejo un enlace donde te vienen errores y sus causas, por si te sirve de ayuda (y por cierto, ella los hornea a 150º durante 13 minutos).

    http://webosfritos.es/2013/02/los-errores-al-hacer-macarons/

    Un beso. - galilea -

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    1. ¡Genial la página! Muchas de las cosas que pone ya las sabía, jeje, yo también estaba bien documentada... pero siempre se aprende algo nuevo, y me tranquiliza saber que lo que me ha pasado a mí son justo los errores más normales ¡sobre todo lo del horno! ese gran desconocido...
      ¡Un besaco!

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  2. parecen deliciosos, a ver si algun dia me animo a probar pero no soy muy cocinillas

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    1. Pues ya sabes, todo es cuestión de echarle ganas! No es tan difícil, o al menos si te conformas con unos mediocres como los míos, jajajaja ¡lo difícil es que salgan perfectos! pero tampoco hay que pedir tanto... ^.^

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  3. que buena pintaaaaaaa
    cuanto tiempo sin pasar por aqui... bss

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    1. ¡Holaaaaa, cuánto sin verte! jajajajaja, tienen buena pinta porque les he hecho las fotos a los más decentes, juas juas, pero tenías que haber visto el desastre al completo...
      ¡Un besote!

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  4. tienen una pinta estupenda! un besoo

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    1. ¡Bueno, deberían estar mucho mejor! pero ricos sí que estaban, eso no te lo voy a negar ^.^

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