Tarta de chuches

Os quiero enseñar una tarta de chuches que he hecho para el cumpleaños de mi niño grande. Es la primera que hago ¡y yo creo que está estupenda! Además va bien cargadita... ¡no veáis lo que pesa! cuando he ido a guardarla hasta yo me he sorprendido de lo que pesaba la "tartita" (y es que es más bien una tartaza! jajajaja)

¿Qué os parece? Tiene buena pinta ¿eh? os animo a hacer alguna ¡ha sido divertido! y el resultado es espectacular... además tampoco he tardado mucho (una hora más o menos) y definitivamente me ha salido todo bastante barato ¡todo son ventajas! Y como sé que algunos están ya pensando "como haga una me voy a hinchar de gominolas y voy a acabar como una foca" pues os digo que también os puede servir de terapia de choque. Al menos yo, después de pinchar tanta gominola, he acabado empachada y ahora mismo no me apetece nada probar la tarta... se me pasará, eso seguro, pero de momento la tarta está a salvo porque yo no tengo ni pizca de ganas de hincarle el diente!!

Y bueno, ya sé que en realidad esto no es una receta propiamente dicha, pero me ha parecido que esta era la sección en que mejor quedaba, al fin y al cabo se come... ¡y bien rica que está! así que ahora os cuento cómo la he hecho paso a paso.


QUÉ NECESITAMOS:
- Corcho blanco, como el que viene en los embalajes de los electrodomésticos. Yo he tenido suerte y conseguí en mi trabajo una plancha gordita de corcho de la altura idónea para la tarta. Si no, podéis aprovechar trozos que tengáis por ahí, uniéndolos unos con otros, y si tenéis que comprarlo lo encontraréis seguro en grandes superficies de bricolaje, tipo Leroy Merlin o Bricodepot. Si lo que encontráis son planchas finitas no os preocupéis, que podéis contar varias piezas iguales y apilarlas.

- En lugar del corcho blanco hay quien utiliza el corcho verde ese que se utiliza para hacer centros de flores y demás, pero a mí personalmente no me termina de convencer para ponerlo cerca de la comida porque se deshace más.

- Papel de aluminio

- Palillos de madera

- Palillos de plástico de colores. Yo estos los he comprado en el Mercadona, en la sección de los vasos y platos de plástico. Se supone que son para aperitivos y por eso son un poco más grandes que los palillos de madera. Eso sí, ya he comprobado que no en todos los Mercadonas los tienen, pero igual los podéis encontrar también en otros supermercados.

- Gominolas de diferentes tipos, en cantidad suficiente (dependerá del tamaño de vuestra tarta). Os recomiendo buscar gominolas grandes para cubrir grandes superficies (nubes, por ejemplo) y luego con algunas gominolas más pequeñas podéis hacer detallitos. Yo compré varias bolsas de gominolas surtidas en el Lidl, ya que comprándolas por bolsas salen bastante más baratas que comprándolas en kioskos de gominolas, y luego si queréis podéis comprar suelta alguna gominola especial que os guste, para los adornos finales.


MANOS A LA OBRA:
- Lo primero es hacer la forma que queramos para nuestra tarta con el corcho. Yo opté por hacerla cuadrada, ya que el bloque de corcho que tenía era rectangular, y con el sobrante le hice un segundo piso. No os preocupéis si tenéis que juntar varios trozos para conseguir la forma o altura que queréis, en plan puzzle, no hay problema.

- Una vez que tenemos clara la estructura, hay que forrar cada uno de los pisos de la tarta con papel albal, para que las gominolas no queden en contacto con el corcho.

En esta foto se ve que yo para el piso de arriba he utilizado varios trozos de corcho, y no pasa nada, porque luego los envuelves juntos con le papel albal y se quedan unidos. E incluso si veis que no queda firme podríais unir los trozos de corcho con palillos de dientes para darle más fuerza.

- Ayudándonos con palillos de dientes de madera unimos los pisos de nuestra tarta. Es importante que nos quede una estructura bien sólida para luego poder trabajar en ella sin miedo a que se nos desarme la tarta.

- Y una vez que tenemos la base, ya sólo nos queda ir pinchando las gominolas a nuestro gusto. Os aconsejo rellenar la mayor superficie posible con nubes, lenguas o gominolas grandes en general, y luego ya irle poniendo detallitos con gominolas más pequeñas.

Esa capa rosa que veis en mi tarta es una plancha de nube que hice yo misma y luego recorté para irla acoplando a la tarta. ¡Os debo la receta! prometo que os la pondré pronto, porque la verdad es que salen unas nubes muy ricas, y si la hacemos en planchas finas resulta super práctico para esto de las tartas.

- En cuanto a los palillos, ya os he comentado que yo utilicé los del Mercadona de colores. Son quizá un poco grandes (os pongo foto para que os hagáis una idea del tamaño) pero para pincharlos en las gominolas yo prefiero que sean de plástico en vez de madera, y además me encanta cómo ha quedado la tarta con todos los palillos de colores asomando. Si no os gusta que se vean pues podéis utilizar palillos de dientes normales e intentar pincharlos por detrás de las gominolas, para que no lleguen a verse.

- ¡Y nada más! sólo queda echarle un poco de imaginación, jugar con las combinaciones de color y procurar ir rellenándolo todo... os aseguro que es divertido, y la alegría que te llevas cuando la ves terminada no tiene precio, sobre todo cuando te pones a pensar que una tarta así, comprada en una tienda, te habría costado el triple!! y encima así eliges tú las gominolas que más te gusten.

Así que ya sabéis, id guardando los embalajes de corcho...

¡¡Besotes de colores!!