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Jaboncitos con inserciones (II)

Bueno, pues tal y como había prometido, aquí está la segunda parte del tutorial de los jabones con inserciones.


Esta vez vamos a partir de los moldes que hicimos en el tutorial anterior y de los conceptos básicos que ya os expliqué con los primeros jaboncitos que hice, y voy a explicar simplemente el proceso a seguir para montar los jaboncitos con las inserciones.


NECESITAMOS:

- Jabón de glicerina puro transparente. Podemos encontrarlo en tiendas especializadas (Gran Velada, A tu manera... por poneros un par de ejemplos) o valen también las pastillas que venden en los supermercados (Lida, Heno de Pravia). El de los super es de color amarillo y ya he comprobado que utilizando jabón transparente los colores de los jaboncitos quedan más brillantes y bonitos que utilizando el jabón del super. Pero de todos modos, para probar, con el del super tiramos perfectamente.

- Jabón de glicerina blanco. Este jabón no se encuentra en supermercados y no hay más remedio que acudir a una tienda especializada. Aún así tenemos dos opciones, o comprar directamente la base de jabón blanco o buscar un tinte "blanco opacador" que podemos añadir al jabón transparente (o amarillo) y de ese modo lo convertimos en blanco y opaco. De todos modos no es obligatorio hacer las inserciones en blanco, para probar la técnica podemos teñir simplemente dos trozos del jabón transparente de colores diferentes y así utilizamos el de un color para la base y el del otro para las inserciones.

- Colorante. Si os decidís a hacer un pedido a una tienda especializada podéis aprovechar y adquirir un colorante específico para jabones. Yo de momento sigo tirando con el colorante alimentario y me va bien.

- Aromatizante. Si compráis base de glicerina transparente merece la pena pedir también algún aroma especial para jabones, ya que la base es inodora. Si utilizáis jabón de glicerina del super podéis ahorraros el aromatizante si queréis, porque esos jabones huelen bastante bien por sí sólos (o al menos a mí me gusta su olor!)

- Alcohol de 96º (el que todos tenemos en casa) y un pulverizador.

- Moldes tubulares (ver cómo fabricarlos aquí)

- Papel albal

- Un cazo, un cuenco (o mejor jarrita) de cristal, un cuchillo, una cuchara y un pequeño embudo.


Y VAMOS AL LÍO:
(Vais a perdonar que de momento no tenga fotos de este tutorial, intentaré explicarme lo mejor posible y cuando haga más jabones editaré y pondré fotos)

Tened en cuenta que algunos pasos están resumidos porque los conceptos básicos para la preparación de jabones de glicerina ya los expliqué aquí. Aseguraos de haber comprendido ese tutorial antes de liaros con este.

- Como veréis he utilizado 2 técnicas diferentes para las inserciones. Por un lado están los corazones, en los que las inserciones están hechas también con un molde de corazón pero más pequeño, y por otro lado están las flores, en las que las inserciones son simplemente una espiral.

- Si queremos hacer las inserciones con molde, como en el caso de los corazones, tendremos que fabricarnos un molde tubular pequeñito, del tamaño que queramos que sea la inserción y exactamente de la misma altura que el molde grande que luego vayamos a utilizar. Derretimos jabón blanco al baño maría (o jabón transparente al que añadamos colorante opacador blanco) y lo vertemos con cuidado (puede sernos útil un pequeño embudo) en el molde (acordaos de verter primero un poquito de jabón, dejar unos segundos que solidifique y selle bien el fondo del molde y luego añadir el resto y llenar el molde hasta lo alto). Lo dejamos enfriar y cuando el jabón esté bien sólido lo desmoldamos.

- Si lo que queremos es una inserción con forma de espiral cogemos un trozo de papel albal y lo doblamos para fabricarnos una especie de bandejita, de la misma altura que el molde tubular grande que luego vayamos a utilizar para el jabón. Derretimos jabón blanco al baño maría (o jabón transparente al que añadamos colorante opacador blanco) y lo vertemos sobre nuestra bandejita, procurando obtener una lámina de jabón muy finita y de grosor uniforme. Lo dejamos reposar unos segundos y antes de que solidifique del todo lo enrollamos sobre sí mismo con ayuda de algún palito o utensilio cilíndrico (yo utilicé el cabo de un cubierto redondo, también podría servir un bolígrafo...). Cuando lo tengamos enrollado acomodamos la espiral según nuestro gusto (se puede hacer más o menos apretada) y la dejamos que solidifique completamente.

- Sea cual se el método que hayamos seguido, a estas alturas ya tenemos que tener nuestra inserción preparada.

- Preparamos ahora nuestro molde tubular grande, el que dará la forma definitiva a nuestros jabones.

- Derretimos jabón de glicerina transparente al baño maría, y añadimos colorante a nuestro gusto y el aromatizante opcional.

- Tomamos la inserción que teníamos preparada y la rociamos bien de alcohol con ayuda del vaporizador. Esto ayudará a que no se nos formen burbujitas de jabón en torno a la inserción, que estropearían nuestro trabajo.

- Introducimos la inserción en el molde tubular, de pie, en la posición en la que queremos que quede. Es importante posicionarla bien y asegurarnos de que luego no se va a mover. Si la inserción se moviera una vez que hayamos vertido el jabón en el molde afectará negativamente al proceso de solidificación y podemos estropear todo nuestro trabajo. Yo lo que hice fue utilizar un trocito de plastilina, en el borde superior del molde, para posicionar la inserción y asegurar así que ésta tuviera un punto de apoyo y no se moviera. Pero bueno, cada uno puede buscar su propia técnica.

- Cogemos el jabón coloreado que teníamos ya preparado y lo vertemos con cuidado en el molde (ya sabéis, primero sólo un chorrito y el resto un minuto después) prestando atención a que se rellenen todos los recovecos del molde, a todo alrededor de la inserción.

- Si una vez lleno el molde vemos que se ha formado espumita en la parte superior podemos eliminarla pulverizando un poco de alcohol.

- Dejamos que solidifique durante unas horas ¡más vale pasarse a quedarse corto! si cuando desmoldamos el jabón estuviera aún un poco blando podríamos deformarlo y estropearlo todo.

- Para desmoldar es tan fácil como retirar los cartones que tenemos alrededor del molde y abrir el plástico completamente.

- ¡¡Y ya tenemos terminada nuestra estupenda barra de jabón!! sólo nos queda coger un buen cuchillo y cortar rebanadas, del grosor que queramos, para tener en nuestras manos los jaboncitos terminados (tened en cuenta que seguramente tendremos de desechar una pequeña porción de jabón al principio y al final de la barra). Como truco os diré que para que las rebanadas nos salgan perfectamente rectas podemos ayudarnos de un inglete, de los que se utilizan en bricolaje (de venta en ferreterías).


En fin, es cuestión de práctica y de maña conseguir unos jabones perfectos ¡pero es muy divertido experimentar! Yo desde luego os animo a intentarlo, y si tenéis alguna duda me lo decís! En cuanto tenga pondré fotos.

¡¡Besitos!!
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Bueno, pues tal y como había prometido, aquí está la segunda parte del tutorial de los jabones con inserciones.


Esta vez vamos a partir de los moldes que hicimos en el tutorial anterior y de los conceptos básicos que ya os expliqué con los primeros jaboncitos que hice, y voy a explicar simplemente el proceso a seguir para montar los jaboncitos con las inserciones.


NECESITAMOS:

- Jabón de glicerina puro transparente. Podemos encontrarlo en tiendas especializadas (Gran Velada, A tu manera... por poneros un par de ejemplos) o valen también las pastillas que venden en los supermercados (Lida, Heno de Pravia). El de los super es de color amarillo y ya he comprobado que utilizando jabón transparente los colores de los jaboncitos quedan más brillantes y bonitos que utilizando el jabón del super. Pero de todos modos, para probar, con el del super tiramos perfectamente.

- Jabón de glicerina blanco. Este jabón no se encuentra en supermercados y no hay más remedio que acudir a una tienda especializada. Aún así tenemos dos opciones, o comprar directamente la base de jabón blanco o buscar un tinte "blanco opacador" que podemos añadir al jabón transparente (o amarillo) y de ese modo lo convertimos en blanco y opaco. De todos modos no es obligatorio hacer las inserciones en blanco, para probar la técnica podemos teñir simplemente dos trozos del jabón transparente de colores diferentes y así utilizamos el de un color para la base y el del otro para las inserciones.

- Colorante. Si os decidís a hacer un pedido a una tienda especializada podéis aprovechar y adquirir un colorante específico para jabones. Yo de momento sigo tirando con el colorante alimentario y me va bien.

- Aromatizante. Si compráis base de glicerina transparente merece la pena pedir también algún aroma especial para jabones, ya que la base es inodora. Si utilizáis jabón de glicerina del super podéis ahorraros el aromatizante si queréis, porque esos jabones huelen bastante bien por sí sólos (o al menos a mí me gusta su olor!)

- Alcohol de 96º (el que todos tenemos en casa) y un pulverizador.

- Moldes tubulares (ver cómo fabricarlos aquí)

- Papel albal

- Un cazo, un cuenco (o mejor jarrita) de cristal, un cuchillo, una cuchara y un pequeño embudo.


Y VAMOS AL LÍO:
(Vais a perdonar que de momento no tenga fotos de este tutorial, intentaré explicarme lo mejor posible y cuando haga más jabones editaré y pondré fotos)

Tened en cuenta que algunos pasos están resumidos porque los conceptos básicos para la preparación de jabones de glicerina ya los expliqué aquí. Aseguraos de haber comprendido ese tutorial antes de liaros con este.

- Como veréis he utilizado 2 técnicas diferentes para las inserciones. Por un lado están los corazones, en los que las inserciones están hechas también con un molde de corazón pero más pequeño, y por otro lado están las flores, en las que las inserciones son simplemente una espiral.

- Si queremos hacer las inserciones con molde, como en el caso de los corazones, tendremos que fabricarnos un molde tubular pequeñito, del tamaño que queramos que sea la inserción y exactamente de la misma altura que el molde grande que luego vayamos a utilizar. Derretimos jabón blanco al baño maría (o jabón transparente al que añadamos colorante opacador blanco) y lo vertemos con cuidado (puede sernos útil un pequeño embudo) en el molde (acordaos de verter primero un poquito de jabón, dejar unos segundos que solidifique y selle bien el fondo del molde y luego añadir el resto y llenar el molde hasta lo alto). Lo dejamos enfriar y cuando el jabón esté bien sólido lo desmoldamos.

- Si lo que queremos es una inserción con forma de espiral cogemos un trozo de papel albal y lo doblamos para fabricarnos una especie de bandejita, de la misma altura que el molde tubular grande que luego vayamos a utilizar para el jabón. Derretimos jabón blanco al baño maría (o jabón transparente al que añadamos colorante opacador blanco) y lo vertemos sobre nuestra bandejita, procurando obtener una lámina de jabón muy finita y de grosor uniforme. Lo dejamos reposar unos segundos y antes de que solidifique del todo lo enrollamos sobre sí mismo con ayuda de algún palito o utensilio cilíndrico (yo utilicé el cabo de un cubierto redondo, también podría servir un bolígrafo...). Cuando lo tengamos enrollado acomodamos la espiral según nuestro gusto (se puede hacer más o menos apretada) y la dejamos que solidifique completamente.

- Sea cual se el método que hayamos seguido, a estas alturas ya tenemos que tener nuestra inserción preparada.

- Preparamos ahora nuestro molde tubular grande, el que dará la forma definitiva a nuestros jabones.

- Derretimos jabón de glicerina transparente al baño maría, y añadimos colorante a nuestro gusto y el aromatizante opcional.

- Tomamos la inserción que teníamos preparada y la rociamos bien de alcohol con ayuda del vaporizador. Esto ayudará a que no se nos formen burbujitas de jabón en torno a la inserción, que estropearían nuestro trabajo.

- Introducimos la inserción en el molde tubular, de pie, en la posición en la que queremos que quede. Es importante posicionarla bien y asegurarnos de que luego no se va a mover. Si la inserción se moviera una vez que hayamos vertido el jabón en el molde afectará negativamente al proceso de solidificación y podemos estropear todo nuestro trabajo. Yo lo que hice fue utilizar un trocito de plastilina, en el borde superior del molde, para posicionar la inserción y asegurar así que ésta tuviera un punto de apoyo y no se moviera. Pero bueno, cada uno puede buscar su propia técnica.

- Cogemos el jabón coloreado que teníamos ya preparado y lo vertemos con cuidado en el molde (ya sabéis, primero sólo un chorrito y el resto un minuto después) prestando atención a que se rellenen todos los recovecos del molde, a todo alrededor de la inserción.

- Si una vez lleno el molde vemos que se ha formado espumita en la parte superior podemos eliminarla pulverizando un poco de alcohol.

- Dejamos que solidifique durante unas horas ¡más vale pasarse a quedarse corto! si cuando desmoldamos el jabón estuviera aún un poco blando podríamos deformarlo y estropearlo todo.

- Para desmoldar es tan fácil como retirar los cartones que tenemos alrededor del molde y abrir el plástico completamente.

- ¡¡Y ya tenemos terminada nuestra estupenda barra de jabón!! sólo nos queda coger un buen cuchillo y cortar rebanadas, del grosor que queramos, para tener en nuestras manos los jaboncitos terminados (tened en cuenta que seguramente tendremos de desechar una pequeña porción de jabón al principio y al final de la barra). Como truco os diré que para que las rebanadas nos salgan perfectamente rectas podemos ayudarnos de un inglete, de los que se utilizan en bricolaje (de venta en ferreterías).


En fin, es cuestión de práctica y de maña conseguir unos jabones perfectos ¡pero es muy divertido experimentar! Yo desde luego os animo a intentarlo, y si tenéis alguna duda me lo decís! En cuanto tenga pondré fotos.

¡¡Besitos!!

4 comentarios:

  1. hola cielo..son preciosos la verdad...jejeje

    muakssssss

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  2. ohhh que jabones mas divertidos!! ideales para cualkier detallito!

    Tienes un premio en mi blog de alfileres, por si kieres pasarte.
    Un besito Isa Sueña Sueños-

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  3. Qué bonitos que son!!!
    Me guardaré el tuto porque seguro que me animo a hacerlos! :D

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  4. Ay, si es que sabes hacer de todo!! Si no supiera que son jabones, me los comería!!!, jajaajja están chulísimos!!
    Besos.

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