¡Bueno, bueno! en mi
entrada anterior ya sugerí la idea de poder hacer chapas caseras, pero eso sí, de tela! y aunque la idea me llamaba poderosamente la atención, el poder hacerlas sólo con estampados de las telas que seas capaz de encontrar me parecía una limitación demasiado grande.
¡¡Pero no os preocuéis, porque he dado con la solución!! ha sido, como siempre, de casualidad, rara vez encuentro en Internet lo que estoy buscando justo cuando lo necesito, pero sí suele pasar que buscando algo completamente diferente, de repente se asome a mi cabecita una idea... el caso es que buscando dónde comprar unas tijeras zig-zag para fieltro (por cierto, ¿alguien sabe dónde comprarlas, en Madrid o por Internet?) llegué a un foro de manualidades varias, me piqué con la conversación... y mis ojos se abrieron como platos al ver a una chica que había probado, nada más y nada menos... (redoble de tampores)... ¡a imprimir tela en la impresora de su casa!! automáticamente me acordé de mis chapas, esas que ahora sí que podría hacer con cualquier diseño que se me ocurriera, con sólo imprimirlo sobre una tela blanca.
Así que probé y los resultados fueron excelentes, jeje, os pongo aquí la foto de las tres que hice el Viernes, a modo de prueba:
Creo que han quedado bastante bien, aunque realmente no voy a conformarme con que sean chapas así tal cual, sin más... no, ya he pensado para cada una un destino diferente, pero eso ya es harina de otro costal... o mejor dicho, de otra entrada.
VEAMOS LOS MATERIALES:
- Tela blanca sobre la que imprimir: la primera prueba la hice con entretela, y no quedó mal del todo, me sirvió para ver que la técnica de impresión sobre tela era posible, pero al tener la entretela un tejido tan espaciado, la terminación dejaba bastante que desear. La tela a utilizar para esta técnica debe ser cuanto más tupida mejor (tupida, que no gruesa), yo utilicé unos recortes de raso blanco que tenía.
- Ordenador y un poquitín de maña para definir los diseños que queremos imprimir... yo utilicé el word y fui insertando las imágenes, nada del otro mundo.
- Una impresora. En el foro del que saqué la técnica se hablaba de impresora de tinta, así que supongo que debe funcionar con ese tipo de impresora, pero no lo he probado. Yo lo hice con una láser, así que con este tipo sí que doy fe de que se puede hacer.
- Un folio, cinta adhesiva y una regla.
- Unas tijeras.
- Botones para forrar y su correspondiente "forra-botones" (ya he hablado de ello
anteriormente).
- Barniz al agua transparente y de acabado brillo.
- Un cierre de broche y pegamento.
A EXPERIMENTAR!!
- Lo primero es elegir qué queremos poner en nuestra chapa, puede ser cualquier cosa, un estampado, un dibujo, unas letras... yo he probado con varias cosas y todas salen bien, eso sí, no esperéis una calidad tan óptima como la obtenida en un papel, pero es bastante razonable. Lo que también he podido observar es que las zonas grandes en tonos oscuros (como mi chapita pequeña) no terminan de salir bien, pero aún así se puede intentar.
- Una vez que tenéis la idea en la cabeza hay que coger un trozo de tela un poco más grande de lo necesario. Recordad que para poder forrar un botón grande el círculo de tela que se necesita debe tener unos 3 cm más de diámetro que el tamaño del botón, es decir, hay que dejar más o menos 1,5 cm de tela sobrante a todo alrededor, que luego se doblará hacia atrás. Pues bien, la tela que tenéis que preparar para imprimir debe ser un poco más grande incluso, para que tengamos por dónde sujetarla. A ver si con este esquema consigo aclarar la cuestión:
- Así que, con estas consideraciones, recortamos la tela necesaria, y la pegamos
muy bien estirada (planchada si es necesario), con tiras de cinta adhesiva, a un folio, que será el que luego metamos en la impresora. Incluso, para aseguraros de que queda bien lisa podéis poner un poquito de pegamento en barra entre la tela y el papel, tened en cuenta que si no queda bien lisita se nos puede atascar el papel en la impresora. Como véis la tela que yo usé tenía una forma bastante irregular, pero es que era un retal que tenía por ahí y lo aproveché todo lo que pude. Procurad que no quede ningún hilacho ni nada suelto, porque eso podría quedarse atascado en la impresora, y entonces sí que nos saldrían caras las chapitas...
- Ahora toca definir exactamente lo que vamos a imprimir, con una hoja de Word nos puede valer perfectamente. Para ello yo medí la posición exacta en la que había pegado la tela al folio y me dibujé en el Word un recuadro en esa misma posición, de ese modo podía estar segura que los dibujos que pusiera dentro del recuadro iban a salir en la tela, y lo que pusiera fuera saldría en el papel... es un truco como otro cualquiera.
- Y sobre esa plantilla vamos agregando las imagenes que queramos imprimir, adaptándolas al tamaño de los botones. Yo recomiendo, una vez que tengamos la composición hecha, probar a imprimir en un papel normal y ver si efectivamente la zona impresa y el tamaño de los dibujos se corresponden a nuestra tela y nuestros botones, es una simple prueba para evitar llevarse luego desagradables sorpresas.
- Y cuando esté todo seguro metemos el papel-tela en la impresora y... ¡voila!! ya tenemos el diseño transferido a la tela!! Eso sí, tratad la tela con cuidado porque la tinta no queda tan permanente como en el papel, y si la raspamos podemos estropear el dibujo.
- El paso siguiente es separar con cuidado la tela del papel, retirando la cinta adhesiva, y aplicar una fina capa de barniz transparente sobre los dibujos recien impresos. Este barniz es para proteger el dibujo y que no se estropee durante la manipulación posterior, pero es necesario que la capa de barniz que demos sea fina y aplicada de forma rápida:
* Si damos mucho barniz, haciendo repetidas pasadas con el pincel por
encima de la tinta, ésta se puede correr y con al humedad formaremos
un borrón.
* Si aplicamos mucho barniz, la tela al secarse se quedará rígida, y nos
dificultará enormemente el proceso de forrado del botón.
En fin, no es difícil, se trata de dar una sola pasada con el pincel por toda la tela sin empapucharla de barniz y con eso es suficiente.
- Una vez que el barniz se haya secado (si no hemos echado mucho será rápido) sólo nos queda recortar la tela al tamaño apropiado para forrar los botones y forrarlos.
- ¡¡Y ya casi hemos terminado!! lo único que queda es echarle a las chapas una, dos o tres capas generosas de barniz para conseguir el acabado brillante, a gusto de cada uno, y pegarles por detrás un cierre de broche, que terminará de darle a nuestro botón su apariencia de chapa.
No os quejaréis de tutorial ¿eh? esta vez me he superado a mí misma, pero es que la técnica lo merecía!! con esto se nos abre un horizonte infinito de posibilidades ¡¡más infinito de lo que ya lo era!! sólo hay que echarle un poco de imaginación ¡¡y tirarse al barro!!!!
Muchos besotes chaperos!!!
¡Bueno, bueno! en mi
entrada anterior ya sugerí la idea de poder hacer chapas caseras, pero eso sí, de tela! y aunque la idea me llamaba poderosamente la atención, el poder hacerlas sólo con estampados de las telas que seas capaz de encontrar me parecía una limitación demasiado grande.
¡¡Pero no os preocuéis, porque he dado con la solución!! ha sido, como siempre, de casualidad, rara vez encuentro en Internet lo que estoy buscando justo cuando lo necesito, pero sí suele pasar que buscando algo completamente diferente, de repente se asome a mi cabecita una idea... el caso es que buscando dónde comprar unas tijeras zig-zag para fieltro (por cierto, ¿alguien sabe dónde comprarlas, en Madrid o por Internet?) llegué a un foro de manualidades varias, me piqué con la conversación... y mis ojos se abrieron como platos al ver a una chica que había probado, nada más y nada menos... (redoble de tampores)... ¡a imprimir tela en la impresora de su casa!! automáticamente me acordé de mis chapas, esas que ahora sí que podría hacer con cualquier diseño que se me ocurriera, con sólo imprimirlo sobre una tela blanca.
Así que probé y los resultados fueron excelentes, jeje, os pongo aquí la foto de las tres que hice el Viernes, a modo de prueba:
Creo que han quedado bastante bien, aunque realmente no voy a conformarme con que sean chapas así tal cual, sin más... no, ya he pensado para cada una un destino diferente, pero eso ya es harina de otro costal... o mejor dicho, de otra entrada.
VEAMOS LOS MATERIALES:
- Tela blanca sobre la que imprimir: la primera prueba la hice con entretela, y no quedó mal del todo, me sirvió para ver que la técnica de impresión sobre tela era posible, pero al tener la entretela un tejido tan espaciado, la terminación dejaba bastante que desear. La tela a utilizar para esta técnica debe ser cuanto más tupida mejor (tupida, que no gruesa), yo utilicé unos recortes de raso blanco que tenía.
- Ordenador y un poquitín de maña para definir los diseños que queremos imprimir... yo utilicé el word y fui insertando las imágenes, nada del otro mundo.
- Una impresora. En el foro del que saqué la técnica se hablaba de impresora de tinta, así que supongo que debe funcionar con ese tipo de impresora, pero no lo he probado. Yo lo hice con una láser, así que con este tipo sí que doy fe de que se puede hacer.
- Un folio, cinta adhesiva y una regla.
- Unas tijeras.
- Botones para forrar y su correspondiente "forra-botones" (ya he hablado de ello
anteriormente).
- Barniz al agua transparente y de acabado brillo.
- Un cierre de broche y pegamento.
A EXPERIMENTAR!!
- Lo primero es elegir qué queremos poner en nuestra chapa, puede ser cualquier cosa, un estampado, un dibujo, unas letras... yo he probado con varias cosas y todas salen bien, eso sí, no esperéis una calidad tan óptima como la obtenida en un papel, pero es bastante razonable. Lo que también he podido observar es que las zonas grandes en tonos oscuros (como mi chapita pequeña) no terminan de salir bien, pero aún así se puede intentar.
- Una vez que tenéis la idea en la cabeza hay que coger un trozo de tela un poco más grande de lo necesario. Recordad que para poder forrar un botón grande el círculo de tela que se necesita debe tener unos 3 cm más de diámetro que el tamaño del botón, es decir, hay que dejar más o menos 1,5 cm de tela sobrante a todo alrededor, que luego se doblará hacia atrás. Pues bien, la tela que tenéis que preparar para imprimir debe ser un poco más grande incluso, para que tengamos por dónde sujetarla. A ver si con este esquema consigo aclarar la cuestión:
- Así que, con estas consideraciones, recortamos la tela necesaria, y la pegamos
muy bien estirada (planchada si es necesario), con tiras de cinta adhesiva, a un folio, que será el que luego metamos en la impresora. Incluso, para aseguraros de que queda bien lisa podéis poner un poquito de pegamento en barra entre la tela y el papel, tened en cuenta que si no queda bien lisita se nos puede atascar el papel en la impresora. Como véis la tela que yo usé tenía una forma bastante irregular, pero es que era un retal que tenía por ahí y lo aproveché todo lo que pude. Procurad que no quede ningún hilacho ni nada suelto, porque eso podría quedarse atascado en la impresora, y entonces sí que nos saldrían caras las chapitas...
- Ahora toca definir exactamente lo que vamos a imprimir, con una hoja de Word nos puede valer perfectamente. Para ello yo medí la posición exacta en la que había pegado la tela al folio y me dibujé en el Word un recuadro en esa misma posición, de ese modo podía estar segura que los dibujos que pusiera dentro del recuadro iban a salir en la tela, y lo que pusiera fuera saldría en el papel... es un truco como otro cualquiera.
- Y sobre esa plantilla vamos agregando las imagenes que queramos imprimir, adaptándolas al tamaño de los botones. Yo recomiendo, una vez que tengamos la composición hecha, probar a imprimir en un papel normal y ver si efectivamente la zona impresa y el tamaño de los dibujos se corresponden a nuestra tela y nuestros botones, es una simple prueba para evitar llevarse luego desagradables sorpresas.
- Y cuando esté todo seguro metemos el papel-tela en la impresora y... ¡voila!! ya tenemos el diseño transferido a la tela!! Eso sí, tratad la tela con cuidado porque la tinta no queda tan permanente como en el papel, y si la raspamos podemos estropear el dibujo.
- El paso siguiente es separar con cuidado la tela del papel, retirando la cinta adhesiva, y aplicar una fina capa de barniz transparente sobre los dibujos recien impresos. Este barniz es para proteger el dibujo y que no se estropee durante la manipulación posterior, pero es necesario que la capa de barniz que demos sea fina y aplicada de forma rápida:
* Si damos mucho barniz, haciendo repetidas pasadas con el pincel por
encima de la tinta, ésta se puede correr y con al humedad formaremos
un borrón.
* Si aplicamos mucho barniz, la tela al secarse se quedará rígida, y nos
dificultará enormemente el proceso de forrado del botón.
En fin, no es difícil, se trata de dar una sola pasada con el pincel por toda la tela sin empapucharla de barniz y con eso es suficiente.
- Una vez que el barniz se haya secado (si no hemos echado mucho será rápido) sólo nos queda recortar la tela al tamaño apropiado para forrar los botones y forrarlos.
- ¡¡Y ya casi hemos terminado!! lo único que queda es echarle a las chapas una, dos o tres capas generosas de barniz para conseguir el acabado brillante, a gusto de cada uno, y pegarles por detrás un cierre de broche, que terminará de darle a nuestro botón su apariencia de chapa.
No os quejaréis de tutorial ¿eh? esta vez me he superado a mí misma, pero es que la técnica lo merecía!! con esto se nos abre un horizonte infinito de posibilidades ¡¡más infinito de lo que ya lo era!! sólo hay que echarle un poco de imaginación ¡¡y tirarse al barro!!!!
Muchos besotes chaperos!!!
Madre miaaaaa!!! Yo es que alucino contigo!!! Me ha encantado la idea!!! y las fotos, y los trucos! y las chapas!!! jajaja me parece una idea genial!!! así puedes forrar el botón con cualquier imagen que te guste o que tu misma diseñes! te mereces un aplauso! plas, plas, plas!!!
ResponderEliminarLa Txica se ha quedado sin palabras... :O
ResponderEliminarMuchísimas gracias chicas!! jeje, pero no siempre tengo tan buenas ideas ¿eh? es sólo que me gusta experimentar y de vez en cuando salen cosas interesantes!!! pero mejor no preguntéis por los experimentos fallidos... jajajaja.
ResponderEliminarUn besote
Oooossssstras, tía, cómo mola esto, ¿no? No había visto esta entrada y es que poder hacer las chapas con el diseño o imagen que tú quieras tiene que ser mucho más gratificante, porque es algo que te va a identificar personalmente o a la persona que vaya dirigida la chapa (como la imagen de la luna, que la tenías desde hace mucho tiempo). Un súper aplauso, al final acabarás montando un puesto o algo, jejeje.
ResponderEliminarJajajajaja, ya decía yo que habías estado extremadamente poco efusiva cuando te dije que te hacía una chapa... un besiño despistailla!!
ResponderEliminargracias por el tutorial ha ssido de gran ayuda, estoy ansiosa por probarlo
ResponderEliminarExelente entrada
Gracias a ti, ya nos contarás qué tal salen tus chapitas!!
ResponderEliminarEn dos palabras impresion-ante, muy chulo,me hago seguidora,un saludo.
ResponderEliminar¡Gracias Xtina!
ResponderEliminarMuy buena idea y ademas original.
ResponderEliminarenhorabuena
suerte
Que buena idea!!! a mi no se me ha ocurrido para las chapas y botones jejejejeje, muchas gracias!!!!
ResponderEliminarhola guapa!!!, seguro que ya te lo han dicho, las tijeras que buscas, yo
ResponderEliminarlas he comprado en el ikea, super baratas y van de maravilla.
besikos
m@ite
Me ha encantado!!! acabo de encontrar tu blog por vitamina, muchísimas felicidades
ResponderEliminarpor cierto, me hago seguidora!
Qué idea tan buena! me ha encantado, además así, en plan casero...nunca se me hubiera ocurrido meter tela en la impresora, pero ahora me están entrando muchas ganas de probarlo!!
ResponderEliminarViva la creatividad! :)